La asambleísta Mónica Salazar explicó el miércoles 23 de abril los motivos que la llevaron a separarse de la bancada de Revolución Ciudadana (RC) para este y el próximo periodo legislativo. Salazar, quien representa a Los Ríos, había anunciado su independencia el 15 de abril, pero ahora detalla los maltratos y la hostilidad que sufrió dentro del partido.
Salazar afirmó que pidió un cambio de curul, pero sus solicitudes fueron ignoradas. "Me quieren obligar a sentarme pese a que tomé una decisión de alejarme del correísmo. No estoy cometiendo un acto ilícito", dijo. La legisladora también reveló que sacó un crédito con la Corporación Financiera Nacional (CFN) para ayudar a los agricultores de su provincia, pero cuando las cosas se complicaron, sus "amigos" abogados en RC le dijeron que no podían hacer nada.

Alexis Mera, exfuncionario del gobierno de Correa, reveló que la deuda de Salazar era cercana al millón de dólares y que estaba en mora con la CFN. El caso estuvo a punto de llegar a la Corte Constitucional, pero fue inadmitido, poniendo en riesgo su puesto como asambleísta.
Salazar también denunció un trato hostil por parte de la dirigencia nacional de RC, especialmente de su presidenta, Luisa González. Reveló que la directiva cantonal fue elegida sin su conocimiento mientras ella estaba en Suiza. "Así me pagaron", dijo con la voz quebrada.
Finalmente, Salazar escribió al expresidente Rafael Correa para coordinar su labor legislativa directamente con él. Sin embargo, Correa le respondió que no quería volver a hablar con ella. "Él terminó de cortar el cordón umbilical que tenía con la Revolución Ciudadana", dijo Salazar.