El viceministro de Gobierno, Esteban Torres, anunció que la focalización de subsidios a los combustibles se implementará este año. Durante una rueda de prensa, Torres destacó que el país está perdiendo recursos significativos debido a estos subsidios, con una inversión de USD 630 millones en las gasolinas Extra y Ecopaís.
La nueva medida implicará una compensación dirigida a los usuarios del transporte, en lugar de a los transportistas, como una forma más eficiente de apoyar a los más necesitados. Sin embargo, esta decisión ha sido rechazada por la Ecuarunari, que argumenta que afectará a la mayoría de los ecuatorianos y beneficiará a las élites empresariales.
El trasfondo de esta medida se relaciona con un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en el que el gobierno de Daniel Noboa se comprometió a focalizar los subsidios a los combustibles. El Ministerio de Finanzas justifica esta decisión al señalar que los subsidios actuales benefician a muchos que no necesitan apoyo, fomentan el consumo excesivo de combustibles fósiles, y propician la corrupción y el contrabando.
Ante esta situación, líderes sociales como Leonidas Iza, presidente de la Conaie, han llamado a los transportistas a unirse a una convención del movimiento indígena el 8 de junio para analizar las decisiones del gobierno y no descartan movilizaciones a nivel nacional. Iza recordó que las marchas de 2019 y 2022 lograron frenar medidas similares del FMI.
El acuerdo con el FMI, conocido como el Acuerdo de Servicio Ampliado (SAF), proporcionará a Ecuador un apoyo financiero de USD 4.000 millones en un período de cuatro años, con un primer desembolso de USD 1.000 millones. Sin embargo, el aumento de la tasa de interés a un 7% preocupa a muchos, dado que en 2022 la tasa era del 1.3%.
