El nombre de Udi Levy es poco conocido para los ecuatorianos, pero este exjefe de inteligencia israelí (Mossad) acaba de salir de Quito en agosto, hasta donde llegó por un caso ligado al terrorismo y narcotráfico.
En entrevista con el diario argentino La Nación, Levy comenta que abandonó la investigación, luego de la vida de los miembros de su equipo, comenzó a estar en riesgo.
“Decidí no continuar porque se había llegado a personas muy altas, era muy peligroso para mí y para mi equipo y los estaba poniendo en riesgo”, dice Levy, sin ahondar en la indagación o señalar a los responsables de las amenazas. Levy es considerado uno de aquellos jefes ‘eternos’ del Instituto de Inteligencia y Operaciones Especiales, o Mossad, una agencia creada en 1949 a raíz de la creación del estado de Israel, y que realiza acciones de contraterrorismo a nivel mundial.
Los Lobos ‘calientan las calles’ tras operativos en las cárceles Según Levy, quien lideró el denominado plan Cassandra, un acuerdo entre Estados Unidos e Israel, gran parte de los fondos que alimentan grupos terroristas como Hezbollah provienen de carteles de la droga afincados en Colombia y Venezuela. “El financiamiento del terrorismo a través del narcotráfico es cada vez mayor.
No solo Irán y Hezbollah continúan usando el narcotráfico como una forma de financiar el terrorismo, (…) En la batalla ingresó un nuevo actor: Siria”, señala Levy convencido de los lazos de grupos terroristas con narcos.
El proyecto Cassandra concluyó en el gobierno de Barack Obama en 2015, y tras dejar el Mossad, Levy ha seguido ligado a perseguir el narcoterrorismo, esta vez como asesor, y cuando un Gobierno o agencias internacionales lo contrata.
La operación del Mossad en América Latina fue desmantelada y partir de allí, Levy sospecha que aumento la actividad entre iraníes y el Hezbollah con Venezuela. “Desde ahí se expanden a toda Sudamérica y Estados Unidos”, asegura el experto de inteligencia.
Y añade que en el caso de Colombia, “como consecuencia del éxito que tuvo la acción de los Estados Unidos, el foco del narcoterrorismo se mudó a Ecuador“.
Sobre la penetración del terrorismo iraní, Levy afirma que se mueven a través de una serie de compañías falsas de alimentación y logística, gracias a la “gran porosidad de las fronteras de América Latina”.
Las declaraciones de Levy ocurren en momentos en que Ecuador atraviesa una serie de atentados con explosivos, dos en Quito, dos en El Oro y dos más en Cuenca, en las últimas 24 horas.
Una camioneta con cilindros de gas explotó en la avenida 12 de Octubre, en el centro norte de Quito, la madrugada del 31 de agosto de 2023.
API Si bien la Policía o las autoridades no han mencionado que se trata de hechos terroristas, sí los han atribuido a las bandas narcocriminales que operan en el país.