¡Agárrense, porque el drama en Riobamba está que arde! 🔥 Lo que parecía una simple obra de embellecimiento se ha convertido en una verdadera batalla legal y de poder entre el Municipio y la Federación Deportiva de Chimborazo (FDCH).
El chisme empezó con un operativo municipal sorpresa. De la nada, maquinaria pesada se apareció en el Estadio Olímpico de Riobamba y demolió la valla y parte del muro perimetral. Imaginen la cara de los deportistas al ver su estadio, su "casa", en pedazos. La indignación fue inmediata.
La versión del Alcalde: "¡Todo en regla y es mi propiedad!"
El alcalde John Vinueza salió a dar la cara y no se anduvo con rodeos. En una rueda de prensa, dijo que todo está bajo control, que la obra es para embellecer la zona frontal del estadio y el Parque Guayaquil, y que tienen todos los permisos.
Vinueza aseguró que ha hablado con deportistas y padres de familia, y que hay acuerdos para mejorar las instalaciones. Negó rotundamente que se vayan a derrocar el muro de escalada o el gimnasio. De hecho, dice que se construirán instalaciones nuevas y más modernas.
Pero la parte más tensa de su discurso fue cuando soltó: "Este es un espacio municipal". Advirtió que obstruir la obra es un delito y lamentó que la interventora de la FDCH, Rocío Recuenco, esté "obstaculizando" el proyecto. ¡Incluso dijo que por su culpa no han podido limpiar para el partido del domingo! 😱
La defensa de la Federación: "¡Esto es nuestro desde 1976!"
La respuesta de la FDCH no se hizo esperar. La interventora Rocío Recuenco se mostró indignada por la "demolición sorpresa", pues asegura que nadie les avisó. Acusa al alcalde de romper los acuerdos de diálogo y de "faltarle el respeto" a los deportistas por actuar de noche.
Pero aquí viene el golpe de gracia de la FDCH. Su asesor jurídico, Arturo Huilcapi, presentó un documento clave: una donación de terrenos que el mismo Municipio le hizo a la Federación en 1976. Huilcapi afirmó que, gracias a esa donación y a más de 65 años de posesión, la FDCH tiene el control legal de esos predios.
¿Quién tiene la razón? El futuro del estadio pende de un hilo
Con estas posturas tan opuestas, el conflicto ha escalado de una obra a un pleito legal de grandes proporciones. La FDCH ya anunció que tomará acciones legales para detener la intervención.
La pregunta que todos se hacen es: ¿quién es el verdadero dueño del terreno? La respuesta definirá el futuro del estadio y la relación entre el Municipio y el deporte en la ciudad. Esto apenas comienza, y parece que la novela de Riobamba promete más capítulos.
