El 26 de mayo de 2025, una explosión en los tanques de almacenamiento de Fuel Oil provocó un incendio masivo en la Refinería Esmeraldas, afectando instalaciones clave y paralizando sus operaciones. Aunque no se reportaron pérdidas humanas, las daños estructurales han sido significativos, con implicaciones críticas para la producción nacional de combustibles.
Un incendio de gran magnitud sacudió la Refinería Esmeraldas el lunes 26 de mayo de 2025, aproximadamente a las 10:20, después de que los tanques de almacenamiento de Fuel Oil en el área de utilidades explotaran. Este evento catastrófico impactó directamente las unidades de Generación de Vapor, Eléctrica y Combustible, pilares fundamentales para la operatividad de la planta.
La emergencia obligó a la evacuación inmediata de más de 500 trabajadores, incluyendo 300 funcionarios de Petroecuador y 250 contratistas externos. Durante la crisis, se activaron protocolos de seguridad que garantizaron la protección de todos los empleados, evitando heridos o fallecidos.
Daños estructurales y operacionales:
El informe técnico preliminar revela graves afectaciones en áreas vitales de la refinería. En la subestación D, por ejemplo, el cuarto eléctrico fue completamente calcinado, con muros y techos severamente dañados. Equipos dinámicos como turbinas de vapor también sufrieron daños irreparables, lo que agrava aún más la situación operacional.
Además, otras infraestructuras esenciales fueron comprometidas, incluidas las bombas de tanquería, sistemas de enfriamiento, galpones de filtros y unidades no catalíticas 1 y 3. La unidad FCC (Cracking Catalítico Fluido), clave para la producción de combustibles y nafta, también resultó afectada, lo que pone en riesgo la capacidad del país para procesar derivados del petróleo.
Impacto económico:
Aunque aún no se conocen las pérdidas económicas totales causadas por el incendio, el costo preliminar de los equipos y materiales dañados asciende a USD 214.000. Estos cálculos incluyen trajes de bomberos, extintores, radios y mangueras utilizadas durante la emergencia. Sin embargo, los expertos advierten que las cifras finales serán mucho mayores debido a los daños estructurales y al tiempo de inactividad de la refinería.
Declaratoria de emergencia:
Ante la magnitud del desastre, la Refinería Esmeraldas fue declarada en emergencia. Las autoridades han anunciado que se destinarán recursos urgentes para iniciar las labores de reparación y recuperación, con la esperanza de retomar las operaciones a principios de julio. Mientras tanto, el país enfrenta interrupciones en el suministro de combustibles refinados, lo que podría generar desabastecimientos en el mercado local y complicaciones en las exportaciones.
La explosión en la Refinería Esmeraldas deja al descubierto las vulnerabilidades de la infraestructura energética del país. Aunque las prioridades inmediatas son reparar los daños y reanudar las operaciones, este incidente plantea preguntas importantes sobre la necesidad de modernizar las instalaciones y fortalecer las medidas preventivas para evitar futuros desastres.
