El 14 de mayo de 2025, la nueva Asamblea Nacional de Ecuador se instalará en Quito para elegir a sus autoridades, con ADN y Revolución Ciudadana disputando el control en un Legislativo fragmentado.
Este miércoles 14 de mayo de 2025, a las 10:00, el salón Nela Martínez del Palacio Legislativo en Quito acogerá la sesión inaugural de la Asamblea Nacional para el período 2025-2029. Los 151 asambleístas electos el 9 de febrero de 2025 tomarán posesión y designarán al presidente, dos vicepresidentes, cuatro vocales del Consejo de Administración Legislativa (CAL) y el secretario general. La sesión, que no requiere convocatoria previa según la Ley Orgánica de la Función Legislativa, será presidida por Annabella Azín, de Acción Democrática Nacional (ADN), por ser la asambleísta más votada, acompañada por Raúl Chávez (Revolución Ciudadana-RETO) como subdirector y Alfredo Serrano (Partido Social Cristiano) como secretario.
El movimiento ADN, liderado por el presidente reelecto Daniel Noboa, y Revolución Ciudadana (RC), del expresidente Rafael Correa, dominarán el hemiciclo con 66 y 67 curules respectivamente, según resultados preliminares del Consejo Nacional Electoral (CNE). Ninguno alcanza la mayoría absoluta de 77 votos, lo que obligará a ambos bloques a negociar con bancadas menores como Pachakutik (9 escaños), Partido Social Cristiano (5 escaños) y otros partidos con uno o dos legisladores. Esta fragmentación, descrita por el analista Marcelo Espinel como un “bipartidismo atípico”, refleja un desafío para la gobernabilidad, especialmente tras tensiones recientes, como una denuncia de ADN por supuesto “delito de rebelión” contra autoridades legislativas que podrían obstaculizar la presidencia de Azín.
ADN, inscrito oficialmente en 2024, emergió como fuerza política tras el ascenso de Noboa en el debate presidencial de 2023, marcado por el asesinato del candidato Fernando Villavicencio. De 14 asambleístas en 2023, ADN creció a 36 curules antes de 2025, atrayendo legisladores de partidos como Partido Social Cristiano, Pachakutik y Revolución Ciudadana. En la nueva Asamblea, 28 de sus 66 asambleístas (42%) provienen de otras organizaciones, incluyendo a Éckener Recalde (ex-Izquierda Democrática), Nathaly Morillo (ex-Construye) y Ferdinan Álvarez (ex-RC). Solo seis asambleístas de ADN son reelectos del oficialismo original, mientras 28 son novatos sin experiencia legislativa, destacando jóvenes como Dominique Serrano Molina, de 19 años, y otros ocho menores de 25.
Annabella Azín, madre de Noboa y líder de la lista nacional de ADN, aporta experiencia como exdiputada del PRIAN y candidata presidencial junto a su esposo, Álvaro Noboa. Su rol en la sesión inaugural refuerza la influencia de ADN, pero también genera críticas por el peso familiar en el movimiento. La Asamblea enfrentará retos inmediatos, como el segundo debate de una enmienda constitucional para exigir “probidad notoria y experiencia” a futuros legisladores, en respuesta a la juventud de algunos asambleístas.
La instalación de la nueva Asamblea Nacional marcará el tono político de Ecuador para los próximos cuatro años. Con ADN y RC en una carrera por alianzas, la gobernabilidad dependerá de la capacidad de negociación en un Legislativo diverso y polarizado. La sesión inaugural, transmitida por canales oficiales de la Asamblea y medios como Ecuavisa, será clave para definir liderazgos y agendas. Los ecuatorianos esperan que este nuevo período supere las tensiones del pasado y priorice temas como seguridad, economía y reformas estructurales. Para más detalles, visite el sitio oficial de la Asamblea Nacional