El ministro de Gobierno, José De la Gasca, aseguró este jueves que la propuesta del presidente Daniel Noboa para recibir apoyo de fuerzas especiales extranjeras no implica la presencia de tropas patrullando las calles de Ecuador. Destacó que la cooperación internacional se centrará en entrenamiento, capacitación y tecnología para combatir el crimen organizado.
En declaraciones a la prensa tras su comparecencia ante una comisión de la Asamblea Nacional, De la Gasca desmintió que unidades militares extranjeras, como los Navy Seals de Estados Unidos, vayan a desplegarse en territorio ecuatoriano. "Se ha creído que van a venir los Navy Seals a patrullar nuestras calles, pero yo no sería tan iluso en creer que algo así va a suceder", afirmó el funcionario, subrayando que la cooperación internacional se dará bajo el marco del derecho interno e internacional.

El ministro señaló que Argentina e Italia han manifestado su disposición para colaborar con Ecuador de manera sostenida en la lucha contra las bandas criminales. Estas organizaciones han sido catalogadas como terroristas por el Gobierno tras la declaratoria de "conflicto armado interno" en enero de 2024, lo que ha permitido la intervención de las Fuerzas Armadas en apoyo a la Policía Nacional.
De la Gasca también respaldó la propuesta del presidente Noboa de reformar la Constitución para permitir nuevamente la instalación de bases militares extranjeras en Ecuador, una medida prohibida desde la Carta Magna de 2008. Esta restricción obligó en 2009 el retiro de la base estadounidense de Manta.
Actualmente, Ecuador recibe asistencia de Estados Unidos y la Unión Europea en el combate al narcotráfico y otros delitos transnacionales. En este contexto, el ministro enfatizó que el crimen organizado no es un problema exclusivo del país, sino un fenómeno global. "Nosotros estamos poniendo la lucha y los muertos en las calles por un problema que es del globo, así que qué mejor que los países se solidaricen también", expresó.
La Asamblea Nacional respaldó el martes las gestiones del Gobierno en la búsqueda de acuerdos de cooperación internacional para fortalecer la seguridad interna y combatir la violencia, que ha alcanzado niveles históricos en Ecuador, con más de 650 muertes violentas solo en enero de 2025.