El caso de Nevil Mina Quiñonez, de 18 años, y Ariel Cheme Franco, de 19, desaparecidos el 10 de julio de 2024 en Esmeraldas, expone la creciente preocupación por presuntas desapariciones forzadas en la provincia. Los cuerpos de ambos jóvenes fueron hallados incinerados una semana después en el cantón Rioverde, a casi 40 kilómetros del lugar de su detención.
Presunta vinculación con operativos militares
Según familiares y testigos, los primos fueron detenidos durante un operativo de la Fuerza de Tarea Conjunta en el barrio San Pedro. Testigos afirman que los jóvenes fueron llevados en una patrulla y que podrían haber fallecido el mismo día. La Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos (Inredh) incluye este caso entre las investigaciones relacionadas con desapariciones forzadas en Esmeraldas desde el inicio del conflicto armado interno en 2024.
Coincidencias con el caso de los niños de Guayaquil
Dos jóvenes fueron detenidos por militares en Esmeraldas. Neivi Mina Quiñónez y Ariel Cheme, tras la presión de sus familiares y medios locales, hoy aparecen dos cuerpos calcinados.
— Ismael Bernal (@Tango95E) July 18, 2024
Las ejecuciones extrajudiciales, torturas y desapariciones forzadas del estado no son legítimas. pic.twitter.com/ZtejLbGuKm
Familiares de las víctimas señalan paralelismos entre este crimen y el caso de los cuatro niños de Las Malvinas, en Guayaquil, ocurrido meses después. En ambos casos, los cuerpos fueron hallados calcinados, lo que refuerza las denuncias sobre prácticas que vulneran los derechos humanos.
La respuesta de las autoridades
Mientras la Fiscalía mantiene una investigación abierta, el Ministerio de Defensa no ha emitido comentarios oficiales. Desde la Fuerza de Tarea Conjunta, un alto oficial aseguró desconocer denuncias específicas en Esmeraldas y afirmó que cualquier caso sería tramitado conforme a la normativa judicial.
Exigencias de justicia
Las familias de las víctimas exigen que se esclarezcan los hechos y que los responsables enfrenten la justicia. Diversas organizaciones de derechos humanos, como el Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos (CDH) y Asfadec, han denunciado violaciones sistemáticas en operativos militares que involucran a adolescentes y jóvenes en situaciones vulnerables.