Un día después de confiscar el avión privado de Nicolás Maduro, Estados Unidos anunció que está evaluando posibles acciones adicionales contra el Gobierno del presidente venezolano. "En coordinación con nuestros socios, estamos considerando una variedad de opciones para demostrarle al señor Maduro y a sus representantes que sus acciones en Venezuela tendrán consecuencias", afirmó el portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, en una conferencia con medios.
Incautación del Lujoso Avión de Maduro
La confiscación del avión, valorado en USD 13 millones, fue llevada a cabo el lunes por el Departamento de Justicia estadounidense en la República Dominicana, siendo posteriormente transferido a Florida. Según las autoridades, la aeronave fue "comprada ilegalmente" mediante una empresa fantasma y sacada de contrabando de EE.UU. para ser utilizada por Maduro.
Esta acción fue respaldada por una orden ejecutiva emitida en agosto de 2019 por el presidente Joe Biden, que prohíbe a los ciudadanos estadounidenses participar en transacciones con individuos vinculados al Gobierno de Venezuela.
Reacción de Venezuela
El Gobierno venezolano calificó la incautación del avión como un acto de "piratería" y afirmó que "se reserva el derecho de emprender cualquier acción legal para reparar este daño a la nación, así como todos los otros daños causados por la política criminal de Washington". El régimen de Maduro sostiene que esta confiscación es parte de una "escalada de acciones" en su contra tras su controvertida victoria en las elecciones del 28 de julio, las cuales han sido rechazadas por numerosos países y denunciadas como fraudulentas por la oposición venezolana.
