La ciudad de Guayaquil ha sido testigo de una nueva polémica en torno a la campaña anticipada para las elecciones presidenciales de 2025. Este jueves, el puente de la Unidad Nacional amaneció cubierto con decenas de pancartas que presentan la imagen del actual presidente, Daniel Noboa, quien busca su reelección. Estas pancartas incluyen la frase "Sarmiento es pueblo" junto con los colores del movimiento oficialista ADN.
La aparición de estas pancartas ha generado un aluvión de críticas y denuncias ciudadanas. Kevin Muñoz, un residente local, ha solicitado una investigación para determinar el origen de los fondos utilizados para esta publicidad. “Las autoridades deberían saber de dónde sacaron los recursos para poner esos afiches”, comentó Muñoz.
Por su parte, Valeria Chávez expresó su frustración con la falta de control sobre la propaganda política. “Es penoso ver que nadie controla esta propaganda desmedida”, señaló.
No es la primera vez que Noboa enfrenta este tipo de acusaciones. En marzo de 2024, se reportó una valla en la vía a Guayaquil que también promovía su imagen con el lema “Alianza Democrática Nacional 2025. Sarmiento es Pueblo”. Además, en la parroquia de Pifo, al nororiente de Quito, se detectaron murales de apoyo a Noboa que incluyen mensajes a favor de su administración y el aumento del IVA al 15%.
El Código de la Democracia es claro en cuanto a la campaña anticipada, considerando estas acciones como infracciones graves que pueden llevar a sanciones severas, como multas que varían de 11 a 20 salarios básicos unificados, e incluso destitución o suspensión de derechos de participación por hasta dos años.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) ha declarado que aún no es posible imponer sanciones debido a que no se ha confirmado oficialmente la candidatura de Noboa. No obstante, los informes sobre estos actos de campaña serán revisados cuando se formalicen las candidaturas.
Segundo Salvador Sarmiento Delgado, conocido por su rol en campañas electorales y su reputación como "obrero de la política", ha afirmado que la propaganda es financiada por amigos empresarios que le donan los materiales. Sarmiento defiende su trabajo, asegurando que siempre pide permiso para usar los espacios publicitarios.
La controversia sobre la campaña anticipada continúa creciendo, y la ciudadanía espera una respuesta adecuada de las autoridades para garantizar la transparencia en el proceso electoral.
La ciudadana Valeria Chávez se sumó a las críticas: “Es penoso ver que nadie controla esta propaganda desmedida”.